domingo, 1 de marzo de 2009

FE RESUELTA Nª51


Nº 51 Diciembre 2008 fe.resuelta@gmail.com Patria- Estado – Destino
Director: Hugo Carreño Aránguiz http://feresueltachile.blogspot.com/ Fundada en Octubre del 2004

LOS SINDICATOS AL PODER

Un movimiento político debe estar dotado de ideas para alcanzar sus objetivos en el ámbito de la sociedad y la cultura, a fin de lo cual debe preparar personas para realizar la proyección de tales ideas a la convivencia de las personas que tienen una trayectoria de realizaciones en las diversas etapas de tiempo que han ido conformando la nación chilena.
El Movimiento Nacional Sindicalista tiene un cuerpo de ideas principales para resolver los problemas de los chilenos y del propio movimiento.
No se puede vivir de prestado ni asumir creatividades infundadas, para parecer lo que no se es.
En el Nacionalismo hay espíritu de pertenencia y vinculación que generan un cuerpo doctrinal y una forma de convivir que enriquece la acción de los militantes, simpatizantes y seguidores.
Desde luego, el uso de símbolos propios creados hace 60 años no son transferibles y corresponden a una usurpación indebida.
La tarea política se ha realizado tanto en espacios abiertos a la convivencia política como a las personas de grupos con vocación política y patriótica.
El movimiento ha buscado la unidad del nacionalismo y eso consta en la historia de la patria.
La soledad y la intransigencia no suponen la acción pública junto a otros referentes nacionalistas cualquiera sea su grado de desarrollo, pues su propia realización los lleva a juntarse con los suyos. En eso es importante la unidad de jóvenes y trabajadores para luchar por la libertad, la dignidad y la justicia.
En esta perspectiva, el Movimiento Nacional Sindicalista se ha acercado a jóvenes estudiantes y a trabajadores que quieren sindicatos más eficaces.
Está en la naturaleza del MNS desarrollar el sindicalismo para la creación de organismos eficaces para conseguir mejores grados de calidad de vida, cuestión que sólo es posible con la participación social plena.
El sindicalismo amarillo de las derechas y el sindicalismo clasista de los marxistas leninistas, que se suman a anarcosindicalismo en su proyección pública, aunque tienen objetivos doctrinarios diferentes y hasta antagónicos, no tienen comparación con el sindicalismo nacionalista que lleva a la unidad,



tecnificación, autonomía, autogobierno y capaz de la participación social plena, es decir, institucionalizada en la creación de organismos que hagan posible la creación de consejos donde participen el gobierno, los empresarios y los trabajadores para diseñar políticas que resuelvan participativamente las aspiraciones y expectativas del sector productivo, laboral y de la autoridad del estado que debe buscar el bien común .
Existen, entre los trabajadores, personas capacitadas para ejercer liderazgo en la conducción del Movimiento Sindical, por sus conocimientos de la cultura y su afán de dignidad y justicia que sustentan la libertad necesaria para la realización de las personas.
En este sentido se debe calificar de exitosa la movilización de los trabajadores públicos, pues lograron el nivel de beneficios aceptables para sus intereses.

PREDICA ABIERTA
El Movimiento Nacional Sindicalista está abierto a la comunidad nacional. Actúa sin encubrimiento y está dispuesto a afrontar cualquier circunstancia.
En este sentido no es excluyente porque sabe que las personas cambian, sobretodo cuando tienen definidos sus conocimientos y han llegado a una actitud que se revela como espiritual.
¿ Cómo se puede plantear esa actitud creativa e innovadora a otros miembros de la agrupación social o productiva en la que se está inmenso?.
A través de la conversación franca sobre materias de mutuo interés de acuerdo al pensamiento doctrinal y valórico que ha forjado el movimiento y por las experiencias y valores creados por todas la generaciones de chilenos a lo largo del tiempo.
Esto requiere un enfoque de sentido nacional lo que implica una mutua concepción de vivencias que los identifican como personas que viven en una misma patria.
No se trata de imponer una ideología como plantean los marxistas leninistas en cuanto a que su prédica a la comunidad provocará una revolución y que ello resolverá los problemas del pueblo. Eso no lo cree ni Granschi,
La cuestión es crear un ámbito de ideas que contenga principios y valores, obras y realizaciones que han hecho posible la vida en comunidad, de modo que su encuentro con la sociedad y el estado surja como resultado del propio quehacer de los cuerpos sociales y de la nación.
Se trata de afincar las ideas y propuestas en la cultura, la cual contiene a lo religioso, a lo filosófico, a la ciencia, la tecnología, el arte y la moral. Es normal que se le de mayor importancia a la ciencia porque ésta disciplina es un instrumento que conoce la realidad con ciertos criterios que garantizan la verdad. Pero en ello existen grados de certeza que no siempre permiten lograr los objetivos, lo que lleva al análisis de metodologías afines a lo que se estudia o investiga, lo cual ha llevado a establecer nuevos criterios, de modo que los conocimientos se ajusten a verdades totales que superan lo parcial de los conocimientos generados por métodos que se basan en consultas que llevan a la estadística y al azar.
En este sentido debemos afirmar que el mando del movimiento ha estado en manos de creadores en el arte, la ciencia, la filosofía y la moral valórica. Este hecho lleva a la prédica abierta de nuestro cuerpo doctrinal, con su doctrina del estilo, de la patria de los valores eternos, del estado justo y de la grandeza naciónal, que es una unidad de destino que surge por la realización histórica de la patria.
Quienes quieran darle forma científica a toda la acción ideológica viven una contradicción que los lleva a la destrucción de su sistema institucional y de vida como ocurrió a los llamados socialismos reales.
El Nacional Sindicalismo, es un movimiento nació - alista que pone el acento en la nacionalidad y la justicia hecha realidad por la acción de sindicatos y gremios en el aparato generador de los bienes y servicios que exige la convivencia. Esto significa que estos organismos, como otros cuerpos sociales, deben participar en las instancias de decisión del estado.
Los planteamientos del movimiento tienen aceptación natural en quienes forman parte de posiciones culturales que realizan proyectos para proteger la vida, el medio y la sana convivencia del pueblo.
No hay dicotomía entre lo que se piensa y la realidad objetiva.
El nacionalista que une su destino personal al destino de la patria, garantiza el fortalecimiento y desarrollo de la nación.
Los grupos de operación y convivencia que forman parte del movimiento nacional sindicalista recorren un camino de verdades y de bienestar que anima al resto de los chilenos a unirse a nuestra marcha, para el engrandecimiento de la nación y la plena realización de las personas y de la patria.
Esto se hace posible por la prédica abierta de lo que somos como grupo generador de grandes desafíos para actuar como nación en cumplimiento de su misión y destino.

ERRORES SIN DESTINO

En los últimos tiempos se ha escrito sobre el accionar político del Movimiento Nacional Sindicalista, según se puede apreciar en cerca de diez libros que se pueden leer en Internet y otros que están en librerías.
En todos ellos se habla de Misael Galleguillos como dirigente del nacional sindicalismo.
Por eso no nos llama la atención que estudiantes universitarios de filosofía y de historia se contacten con Galleguillos para desarrollar trabajos de investigación sobre la génesis y el desarrollo del movimiento, para cumplir con tesis de grado o de título para terminar sus estudios.
El MNS es parte de una historia que se inició en 1947 y que prosiguió con la fundación del Movimiento Nacional Sindicalista en 1949. Desde entonces ha actuado en forma permanente como forjadores de un nacionalismo patriótico y social que tuvo la denominación MRNS entre los años 1952 y 1983 para tomar en ese año la decisión de volver al origen y denominarse MNS, denominación que ha perdurado en el tiempo.
En el 2004 hubo un pequeño grupo que planteó una escisión que se transformo en errores sin destino,
que constituyen un punto vacío que sólo beneficia a los enemigos del nacionalismo chileno.
Estas personas carecen de representación institucional porque no han sido protagonistas de los hechos políticos analizados en las publicaciones y estudios que valoran su accionar en la política contingente que se realizó entre 1970 y 1983 para continuar su vida institucional hasta nuestros días.
Hoy se sabe que el Movimiento formó parte de un sector de sensibilidad social junto a otras personas, entre las cuales algunos eran oficiales generales con mando político, que rechazaban al neoliberalismo y sus ambiciones por tener poder económico y político en el gobierno militar.
No hay razones morales para aparecer como continuadores del historial nacional sindicalista, tanto en su pensamiento como en sus obras y realizaciones.
El Movimiento ha tenido dirigentes responsables frente al accionar de la política y no ha eludido su quehacer cuando las circunstancias son adversas.

No hay comentarios: